Diciembre contabiliza una media diaria de once multas frente a las 53 interpuestas a lo largo de noviembre.
Del balance de denuncias interpuestas durante el mes de diciembre con el radar de Simancas se desprende que el número de las mismas ha descendido considerablemente respecto a las registradas en noviembre, un dato que para la Policía Municipal de la localidad acredita que se cumple el objetivo prioritario de este sistema, que no era otro que reducir la velocidad en el Camino Viejo de Simancas y en la carretera de Pesqueruela para garantizar una mayor seguridad.
Este dispositivo se ha activado tres jornadas a lo largo del mes de
diciembre –los días 10, 11 y 20–, este último día tanto durante la
mañana como por la tarde, con el resultado de 35 conductores que
superaron los límites de velocidad establecidos (algo más de once de
media al día), lo que supone un 78% menos con respecto a la media
registrada en noviembre (53 cada día que estuvo activado), mes en el que
se instauró este servicio.
A pesar de estas halagüeñas estadísticas, fuentes policiales
lamentan que algunos conductores «circulen por las curvas de Pesqueruela
a más velocidad que la permitida en una autopista».
Los datos de diciembre arrojan un total de 28 sanciones (de 100
euros cada una), que no conllevan retirada de puntos; siete de ellas
graves, éstas sí con detracción variable de puntos en función del exceso
cometido, destacando dos infracciones que acarrean 400 euros de multa y
cuatro puntos.
Estas dos imprudencias se cometieron en cada una de las vías
vigiladas: en el Camino Viejo de Simancas el infractor circulaba a 113
kilómetros por hora en una zona limitada a 60 kilómetros hora, mientras
que el segundo fue detectado en la carretera de Pesqueruela cuando
transitaba a 122 kilómetros por hora en una zona limitada a 70. Los
cinco restantes de este capítulo tendrán que abonar 300 euros y se les
retirará dos puntos de su carnet de conducir. El pago de estas multas en
los primeros veinte días naturales implica un descuento por ‘pronto
pago’ del 50%.
Un dispositivo polémico
El pasado 5 de noviembre entró en funcionamiento el dispositivo
móvil del control de la velocidad, que llegó a captar en su primer mes a
422 conductores por encima de las limitaciones establecidas, de los que
cuatro cometieron una infracción muy grave, 52 grave con retirada de
puntos, y otros 366 fueron sancionados económicamente pero sin retirada
de puntos.
La colocación del radar se justificó desde el ayuntamiento de la
villa de Simancas, además de en la seguridad colectiva, por los 21
accidentes registrados en el año natural comprendido entre octubre de
2011 y el pasado mes de septiembre de este 2012. En cinco de estos
siniestros se contabilizaron heridos: un atropello, dos alcances y dos
invasiones del carril contrario. En el resto –16– tan solo los daños
fueron materiales.
Fuente: Elnortedecastilla.es. 05/01/13
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